¡Hola!

Estos últimos días del año son lo típicos en los que parece que hay que hacer balance y un resumen de lo que hemos vivido los 365 días previos. Si el año no ha sido especialmente bueno quizás la primera opción sea «no quiero pensar, que se acabe ya este 2015». Sin duda, es más que funcional esta postura pero, quizás, sería positivo hacernos una pequeña pregunta al respecto, ¿he podido hacer algo para evitar algún error o mala experiencia vivida este año? Si la respuesta es NO, poco se puede hacer pero si es un NO relativo o un SI es dónde podemos actuar, analizar en qué fallamos, para que, al menos, el próximo año cometamos otros errores diferentes, ya que de ése, ya «aprendimos».

NUEVO-AÑO

La memoria es la encargada de que los estímulos, vivencias y conocimientos que percibimos y atendemos se ordenen, se clasifiquen, se almacenen y se recuperen. ¿Por qué puede fallar este gran baúl de almacenamiento? Las dificultades más frecuentes de cara a la imposibilidad de recuperar un recuerdo suelen producirse por la falta de atención, desuso y el paso del tiempo, interferencia de unos recuerdos sobre otros y el estado emocional (depresión, ansiedad y estrés). El paso del tiempo, queda marcado por el efecto de primacía y recencia, las personas recordamos mejor lo que sucede primero, y también recordamos bien lo que sucede a lo último, pero recordamos menos lo que sucede en la mitad de un acontecimiento. Esta es la causa por la que es posible que no recordemos experiencias de mediados de año, salvo que sean significativas o intensas y el recuerdo haya quedado especialmente bien almacenado.

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Cerebro viviente. Por el coreógrafo Ernst Meisner, el Ballet Nacional de Danza y Nova College en Amsterdam

Internet está invadido de mensajes, de propuestas y de esperanzas albergadas para el año nuevo…¿habéis hecho ya el listado de buenos propósitos para 2016? (siempre que haya algo que se quiera cambiar, que puede no ser el caso…). En este vídeo de Redes llamado «Cuando al cerebro le falta voluntad» señalan los inconvenientes de la multitarea para provocar cambios en nuestra mente y aconsejan establecer pocas metas/propósitos, llevarlos a cabo poco a poco, con pequeñas intenciones que podamos ir incorporando a nuestras rutinas; ya que a veces, elaboramos una gran lista que se desvanece rápidamente y al no conseguirlo, se abandonan en conjunto. Bajo el lema «Este año SÍ QUE SÍ», en este artículo proponen 7 claves para conseguir lo que nos propongamos, ¿algo novedoso? ¡muchos pensareis que no!. Desde mi punto de vista, no hay nada mágico, lo que puede serlo es nuestro camino, nuestra constancia, tolerancia a la frustración y el autorrefuerzo que nos demos por los pequeños logros conseguidos.

«La victoria más dura es la victoria sobre uno mismo».

Os deseo lo mejor para el 2016, 366 oportunidades para sacar la mejor versión de nosotros mismos.

¡Feliz Año Nuevo!

Gracias a los que me seguís, leéis, a los pacientes que he tenido la suerte de conocer este año, en general, GRACIAS porque el 2016 compartido con vosotros, ¡no puede ser malo! 🙂